CHAD
Por: Aurore Bonny
El presidente de Chad, Idriss Déby Itno, quien recientemente fue reelegido para un sexto período presidencial, murió este martes debido a las heridas causadas durante enfrentamientos entre el Ejército del país y el grupo armado denominado Frente para el Cambio y la Concordia en Chad (FACT).
Déby murió poco después de haber resultado ganador en las elecciones presidenciales del 11 de abril con más del 79% de los votos. El mandatario africano resultó herido durante un enfrentamiento entre el Ejército y los rebeldes durante el fin de semana y sucumbió días después, según indicó el martes el Ejército chadiano.
Durante 30 años, Idriss Déby lideró el destino de Chad después de dar un exitoso golpe de Estado militar contra su antecesor, Hissein Habre, en 1990.
Antes de llegar a la presidencia del país, Déby era un destacado militar. Con un bachillerato científico, ingresó en la formación militar en Yamena (la capital de Chad) entre 1975 y 1976 y luego obtuvo un título profesional en aeronáutica de Francia.
Tras su regresó a su país en febrero de 1979, fue nombrado jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas del Norte en 1980 después de haber demostrado sus capacidades militares.
Tras ser ascendido como coronel, Déby regresó a Francia para asistir a la Escuela de Guerra InterArmada entre 1986 y 1987. A su regreso a Chad, fue nombrado asesor de la Presidencia de la República en materia de defensa y seguridad.
Durante su rebelión contra Hissein Habre, el entonces presidente de Chad, nació el Movimiento Patriótico de Salvación en 1990.
Deby derrocó a Habre y fue nombrado presidente el 28 de febrero de 1991, con la adopción de la Carta Nacional y fue reinstalado como presidente el año siguiente después de las primeras elecciones multipartidistas en el país.
A pesar de las fuertes protestas de sus oponentes y la sociedad civil para que abandonara el cargo, Déby se mantuvo en la silla presidencial hasta su muerte.
Su candidatura a un sexto mandato en la presidencia desató una ola de protestas a las que las autoridades bajo su mando respondieron violentamente, algo condenado fuertemente por organizaciones de derechos humanos.
El comandante generó críticas y elogios
Illaria Allegrozi, investigadora de la organización Human Rights Watch, afirmó respecto a la muerte de Déby que el mandatario ha dejado "un legado de represión y violaciones de los derechos sociales y económicos en su país".
Survie, una asociación francesa anticorrupción en países en desarrollo, catalogó a Déby como "un dictador", "un gran criminal" que apoyó al imperialismo francés al permitir la injerencia francesa en Chad.
Los homólogos africanos de Déby, sin embargo, están llenos de elogios para el hombre cuya "valentía" y "grandes hazañas armadas" en la lucha en curso por la paz y la estabilidad en África, le han hecho merecedor del título de "Mariscal", un mérito que recibió el 11 de agosto de 2020, después de una mayoría de votos en la Asamblea Nacional de Chad.
Ver también: Líderes africanos expresan su pesar por la muerte del presidente de Chad
Roch Marc Christian Kaboré, presidente de Burkina Faso, afirmó respecto a Déby que era "un gran panafricanista, comprometido con convicción y determinación en la lucha contra el terrorismo en la cuenca del lago Chad y el Sahel".
Bajo el gobierno de Déby, se enviaron miles de soldados chadianos para apoyar a los países del Sahel en sus campañas antiterroristas.
El fallecido mandatario estuvo altamente involucrado con los países occidentales y africanos y también participó activamente en la estabilización de Libia tras la muerte de Muamar Gadafi, el expresidente libio.
Para Faure Gnassingbe, su homólogo togolés, el compromiso de Déby "con la estabilidad del Sahel fue constante".
Moussa Faki Mahamat, presidente de la Comisión de la Unión Africana, lo describió como un "gran estadista y líder militar".
El presidente de Nigeria, Muhammad Buhari, afirmó que la muerte de Idriss Déby generará un "gran vacío" en los esfuerzos para enfrentar conjuntamente a los terroristas de Boko Haram y Daesh/ISIS en el África occidental.
Frente a la creciente amenaza de Boko Haram, Déby había aumentado la participación de Chad en la Fuerza de Tarea Conjunta Multinacional (MNJTF), una unidad multinacional de Níger, Nigeria, Benin, Camerún y Chad para neutralizar a los terroristas de Boko Haram en la región.
La insurgencia de Boko Haram en la región ha acabado con la vida de más de 30.000 personas y ha dejado más de 3 millones de desplazados.
*Camilo Hernández contribuyó a la redacción de esta nota.