ESTAMBUL

Desde el inicio de la ofensiva de Israel contra la Franja de Gaza el 7 de octubre del año pasado, la respuesta de la comunidad internacional a la violencia ha variado: algunos países impusieron prohibiciones totales a la exportación de armas a la nación atacante, otros restricciones parciales y otros enfrentan críticas por continuar sus envíos.

Si bien los expertos de la ONU dicen que la transferencia de armas a Israel puede constituir graves violaciones de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario, así como complicidad estatal en crímenes internacionales, no todos los países han respondido a estas preocupaciones.

Suspensión total a las exportaciones de armas

Canadá anunció en marzo una prohibición total de todos los envíos de armas a Israel. La ministra de Asuntos Exteriores, Melanie Joly, dijo que la decisión se tomó tras una moción parlamentaria que fue aprobada por una mayoría significativa.

En contraste con su declaración, algunos informes sugirieron que Canadá implementó una "pausa temporal en las exportaciones militares no letales". El Gobierno canadiense dijo también que los permisos existentes no se cancelarían.

En Italia, como respuesta al líder del principal partido de oposición, el Partido Demócrata (PD), el vice primer ministro y ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, indicó en enero: "Decidimos no enviar más armas a Israel a partir del 7 de octubre, por lo que no hay necesidad de discutir este tema".

En España, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, indicó en enero que el país había cesado las ventas de armas a Israel desde el 7 de octubre. En mayo, declaró una prohibición de atracar en puertos españoles a los barcos que transportan armas a Israel.

Suspensiones parciales, evaluaciones caso por caso

Reino Unido suspendió 30 de las 350 licencias de exportación de armas a Israel después de que una revisión concluyera que existía un "riesgo claro" de que esas armas se usaran de manera que se viole el derecho internacional. El ministro de Asuntos Exteriores, David Lammy, enfatizó la obligación legal de revisar las licencias de exportación a la luz del conflicto en curso.

La respuesta de Bélgica se ha desarrollado a nivel de regiones: las regiones de Bruselas-Capital y Valona han impuesto prohibiciones a las exportaciones militares a Israel. Valona también suspendió dos licencias otorgadas a la empresa PB Clermont para la exportación de municiones a Israel y citó como razón la decisión provisional de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre Israel y el empeoramiento de la situación humanitaria en Gaza.

Dinamarca anunció un "enfoque muy restrictivo" para las exportaciones de armas a Israel e implementó evaluaciones caso por caso considerando las "consecuencias desastrosas" del conflicto en Gaza. El Gobierno danés se ha comprometido a aplicar criterios basados ​​en el Tratado de Comercio de Armas de la ONU y las reglas de la Unión Europea.

Países Bajos también adoptaron una suspensión parcial tras una sentencia judicial local que ordenó al Gobierno dejar de enviar piezas de aviones de combate F-35 a Israel. La decisión del tribunal se produjo en respuesta a una apelación de organizaciones de derechos humanos que argumentaron que estos suministros contribuían a violaciones del derecho internacional.

Aunque no hubo una prohibición a nivel nacional por parte de Japón, la empresa japonesa Itochu Corporation reveló el 5 de febrero su decisión de poner fin a su colaboración con el contratista de defensa israelí Elbit Systems a finales de febrero. El país suele ser escenario de manifestantes que piden al Gobierno que deje de colaborar con las empresas de defensa israelíes.

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Futuras suspensiones y llamados a los Gobiernos

Una petición fue presentada en un alto tribunal de India para detener las licencias para las empresas del país que exportan armas a Israel. La petición sostiene que la nación del sudeste asiático está sujeta a las leyes y tratados internacionales que prohíben el suministro de armas a los Estados acusados ​​de crímenes de guerra.

En Australia, un legislador instó al Gobierno a cesar todas las exportaciones militares, al acusarlo de complicidad en el genocidio de los palestinos.

De manera similar, la ministra belga de Desarrollo, Caroline Gennez, pidió a la UE que suspenda las exportaciones de armas a Israel y otras zonas de conflicto en Oriente Medio.

Un grupo de más de 30 organizaciones no gubernamentales ha instado al gobierno alemán a detener de inmediato las exportaciones de armas a Israel debido a la actual crisis humanitaria en Gaza. Además, un grupo de abogados de derechos humanos presentaron una demanda para suspender las licencias de exportación de envíos de armas a Israel. Sin embargo, los informes de los medios de comunicación sugieren que un tribunal de Berlín desestimó la moción.

La CIJ inició las audiencias sobre un caso presentado por Nicaragua contra Alemania por facilitar el genocidio en Gaza mediante su apoyo a Israel.

En EEUU, ocho senadores, incluido el senador independiente Bernie Sanders, enviaron una carta al presidente Joe Biden, en la que lo instaron a dejar de suministrar armas a Tel Aviv y destacaron que los envíos interfieren con la asistencia humanitaria estadounidense.

La comunidad internacional también ha hecho llamados para que los Gobiernos pongan fin a los acuerdos de armas con Israel.

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Continúan las preocupaciones sobre las exportaciones a través de terceros países

A pesar de las suspensiones oficiales, los informes sugieren que algunos países continúan suministrando armas a Israel a través de terceros.

Por ejemplo, algunos informes sugieren que las empresas privadas británicas continúan vendiendo armas a Israel. Italia y Noruega han enfrentado acusaciones similares dado que informes indican que las armas y municiones continúan llegando a Tel Aviv a pesar de las prohibiciones oficiales. A pesar de la ley noruega que prohíbe la venta de armas a cualquier país en guerra, los informes de los medios han dicho que Israel continúa adquiriendo armas producidas en una subsidiaria estadounidense de una empresa de defensa en la que Oslo tiene una participación del 50%.

Israel ha continuado su brutal ofensiva contra la Franja de Gaza desde un ataque de Hamás del 7 de octubre, a pesar de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que exige un alto al fuego inmediato.

Más de 40.800 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, han muerto desde entonces y más de 94.000 han resultado heridos, según las autoridades sanitarias locales.

El bloqueo permanente del enclave ha provocado una grave escasez de alimentos, agua potable y medicinas.

Israel se enfrenta a acusaciones de genocidio ante la Corte Internacional de Justicia por sus acciones en Gaza 

*Aicha Sandoval Alaguna contribuyó con la redacción de esta nota.