Los civiles de la ciudad de Al Raqa, en Siria, siguen arriesgando sus vidas para cruzar el río Éufrates tras un año en que los puentes de conexión fueran destruidos.

Las estructuras que unen el centro de la ciudad de Al Raqa con áreas rurales al sur y al occidente del país, colapsaron cuando las fuerzas de la coalición liderada por Estados Unidos, que incluía a miembros terroristas del YPG/PKK, atacaran la ciudad en enero de 2017 durante una campaña que pretendía combatir a los terroristas de Daesh.

Desde octubre de 2017, los terroristas del YPG/PKK han tomado el control de Al Raqa, que fue alguna vez el enclave de Daesh.

Los terroristas del YPG/PKK no han reparado los puentes para evitar el regreso de más civiles al centro de la ciudad y obstaculizar su libre circulación, le dijo a la Agencia Anadolu una fuente local que habló en condición de anónimo debido a amenazas de seguridad.

Los residentes usan embarcaciones de carga que no están en condiciones óptimas para transportar ni a las cargas ni a las personas, y ponen en riesgo sus vidas.

Las balsas, que son utilizadas por unas 2.000 personas diariamente, satisfacen diversas necesidades, como la transferencia de pacientes, el transporte de civiles, el suministro de alimentos y materiales de construcción.

Los terroristas del YPG/PKK y su llamada asamblea civil de Al Raqa han impuesto aranceles a la comida y el material transportado en las balsas, según informó la fuente.

Los propietarios de las balsas dijeron que advertían a la gente sobre los riesgos, pero no tenían otra opción.

Mohammed Abu Khalid, dueño de una de las embarcaciones, dijo que “cruzar el río por medio de las balsas es tanto arriesgado como costoso”.

Khalid explicó que los impuestos de transporte dependen del número de personas a bordo y el peso de los materiales y agregó que el centro de la ciudad de Al Raqa quedó convertido en escombros cuando el YPG/PKK despejó el área de los terroristas de Daesh.

El 17 de octubre de 2017, el YPG/PKK, respaldado por las fuerzas estadounidenses, eliminó la presencia de los terroristas de Daesh en Al Raqa. Más de 2.000 civiles fueron asesinados durante la operación respaldada por Estados Unidos. Las imágenes captadas por los corresponsales de la Agencia Anadolu mostraron que toda Al Raqa se convirtió en escombros.

Un grupo de activistas, llamado Raqqah es Asesinado Silenciosamente, informó el 17 de octubre de 2017 que el 90% de la ciudad fue demolida.

El 14 de diciembre de 2017, la Red Siria para los Derechos Humanos dijo en un informe que 2.371 civiles, entre ellos 562 niños, murieron durante la operación y alrededor de 450 mil civiles quedaron desplazados.

Los terroristas del YPG/PKK comenzaron a saquear la ciudad después de tomar el control. También bloquearon la entrada de civiles, que habían huido de los enfrentamientos y querían regresar a la ciudad.

*Daniela Mendoza contribuyó con la redacción de esta nota.