Ecuador busca tratamientos experimentales para el COVID-19 y abrirá ciudades y aeropuertos en junio
Así lo anunció el ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, quien también habló sobre la nueva fase en la lucha contra el coronavirus en Quito, la crisis sanitaria y el requisito de pruebas a todos los viajeros que ingresen al país.
QUITO, Ecuador
Por: Lourdes Romero
Ecuador es uno de los países de Latinoamérica más golpeados por la pandemia del COVID-19, cuya cifra de contagios sobrepasa los 40 mil casos y cuenta con más de 3.400 fallecimientos. Con un presupuesto de más de USD 200 millones para temas de salud, el país debió afrontar una de sus peores crisis sanitarias en medio de 78 días de confinamiento.
Desde este mes de junio, Ecuador reabrió sus aeropuertos para vuelos internacionales y desde este miércoles 3 de junio Quito se apresta a cambiar al color amarillo en el semáforo epidemiológico, para reactivar la economía que hasta la fecha registraba al menos USD 15.863 millones en pérdidas a escala nacional.
El ministro de Salud de Ecuador, Juan Carlos Zevallos, quien asumió la cartera en medio de la pandemia, habló con la Agencia Anadolu sobre algunas acciones que está tomando el país andino con apoyo internacional de EEUU y la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo que ha permitido, en parte, combatir la peor crisis sanitaria que ha vivido esa nación.
¿En términos de apoyo internacional cómo está trabajando Ecuador para combatir el COVID-19?
Estamos luchando siempre en contra de la competencia internacional. Hay un montón de necesidad para conseguir los reactivos que se requiere para las pruebas PCR (pruebas rápidas para enfermedades infecciosas) pero estamos trabajando de manera coordinada siempre con la ayuda de la Cancillería y las embajadas. Una de ellas es con la embajadora de Ecuador en EEUU, Ivonne Baki, quien nos ha ayudado mucho porque vamos a participar en ensayos clínicos, por ejemplo, con nuevos medicamentos y tratamientos. Hay una coordinación correcta para recibir la ayuda.
¿Cómo se ejecutará esta participación?
Lo haremos en coordinación con la OMS y a través de la Embajada estadounidense para conseguir algunos de los medicamentos que están siendo utilizados como tratamiento experimental para el COVID-19. El Remdesivir es uno de los que nosotros utilizaremos y no solo estamos en coordinación con el laboratorio que lo produce, sino también con la OMS. Tenemos una estrecha relación con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Atlanta, para seguir colaborando en términos de vigilancia activa, laboratorio, reactivos, entre otros.
¿Cuándo iniciarán estos ensayos clínicos en Ecuador?
Estamos en la gestión. Hemos enviado la aplicación y expresado nuestra voluntad de participar y esperamos tener una respuesta en estos días. De nuestra parte como país, por ejemplo el ARCSA (entidad que emite permisos sanitarios en Ecuador) y del Ministerio (de Salud), en general tenemos una muy buena disponibilidad para que estos procesos se aligeren.
¿Cómo realizarán este tipo de ensayos?
Es un protocolo experimental y se lo tiene que hacer a través de un consentimiento informado del paciente, habrá un comité de ética, es decir que se tendrá todo un protocolo establecido para su aplicación tanto con el Remdisivir, que es un antiviral, pero también existe un estudio de la OMS que utiliza otro tipo de medicamentos, particularmente el plasma de personas que ya han pasado la infección y que tienen anticuerpos, y que se puede utilizar en pacientes afectados.
¿Cómo trabajarán para que no exista un rebrote con los pasajeros que llegan del exterior, teniendo en cuenta que ya se abrieron los aeropuertos?
Existe un lineamiento en coordinación con la Ministra de Gobierno y el Canciller, en el que hemos hecho un trabajo de organización y una especie de inventario de todos aquellos países que ofrecen un examen PCR y se estableció que para venir al Ecuador se necesita que la persona presente un PCR negativo.
Ver también: Quito entrará en una nueva fase de flexibilización de sus medidas preventivas frente al COVID-19
¿Qué deberán hacer esos pasajeros provenientes de países que no realizan ese tipo de pruebas?
Hay muchos países que no ofrecen pruebas PCR pero tendrán que conseguirlo. Con ello no quiero minimizar el esfuerzo que ello significa, pero tampoco puedo yo arriesgar, como autoridad máxima de sanidad, el que personas que vienen del extranjero contaminen y todo el sacrificio enorme que el pueblo ecuatoriano ha hecho, 17 millones de personas en términos de confinamiento, se acabe con un brote nuevo como el que sufrió Guayaquil meses atrás. Ello no es permisible.
¿Al ingreso al país el Ministerio de Salud realizará pruebas rápidas?
Sí, también está contemplado en los aeropuertos internacionales de Quito y Guayaquil. Hay un protocolo bien elaborado, pero que también puede cambiar a medida de cómo se vaya presentando la situación en otros países. Por ejemplo, se pensaría que los viajeros provenientes de Brasil no podrán venir por el alto nivel de contagio. Entonces hay una lista de países que irá cambiando, estamos trabajando con todos los consulados que Ecuador tiene y en coordinación con el Comité de Operaciones de Emergencia y la Cancillería.
¿Qué pasa con EEUU donde existe una alta cifra de contagios y también de ecuatorianos que podría volver al país?
De igual manera, las personas que quieran retornar de Estados Unidos deberán presentar su examen PCR. Este será un requisito tal como se hace por ejemplo con vacunas como la de la fiebre amarilla. Necesitamos que la gente entienda que esto es poner en peligro a una gran cantidad de la ciudadanía y no vamos a permitir que eso pase. La prueba PCR negativa es algo que se tiene que hacer y será una condición más para viajar a Ecuador.
Quito se apresta a cambiar al color amarillo en su semáforo epidemiológico. ¿La ciudad está preparada para que las personas vuelvan a una relativa normalidad de actividades?
Entre el 26 y 30 de abril se presentó ya le pico máximo de los contagiados en Quito y como cualquier otra enfermedad infecciosa las consecuencias del contagio se presentan después, particularmente en este virus ha sucedido entre tres o cuatro semanas después. Es decir que en este momento, la demanda de camas es donde estamos en el pico máximo. Sin embargo, creo que la dolorosa experiencia de Guayaquil nos ayudó a prepararnos mejor y estamos preparados para atender de mejor manera los casos que sean necesarios.
Es decir, Quito llegó a su pico y la curva empezará a descender, ¿pero el cambio de semáforo no influirá para que el número de contagios se incremente?
Los contagios van a incrementarse, es lo que estamos viendo que ha sucedido no solamente en Ecuador sino con la experiencia de algunos países latinoamericanos, de Asia y de Europa. Es que hay ondulaciones de la curva, el pico que se llama, y luego hay como otros pequeños brotes y eso lo entiende uno muy bien porque el número de contagios se va dando conforme nosotros estemos exponiéndonos un poco más. Aquí el punto importante es que esas ondulaciones no deben sobrepasar un cierto límite. Por ejemplo, en Guayaquil el pico máximo al que se llegó fue de 527 contagiados en un solo día y en Quito no hemos pasado de 132.
¿Se registrarán más brotes en Quito?
Sí, vamos a tener más brotes y se van a ver más picos, pero mientras no pasen del número de 200 el sistema sanitario actual que hemos preparado con contingente humano, infraestructura, respiradores, en realidad podemos sostener eso sin ningún problema. Si sobrepasa de ese número sí vamos a tener problema, pero eso no ha sucedido hasta este momento en Quito.
Ver también: ¿La pandemia del coronavirus está en el pico en los países de América Latina?
¿Cómo han reaccionado el resto de ciudades que ya tienen su semáforo epidemiológico en amarillo?
Se ha evidenciado que existe un descenso en la curva de contagios. Yo visité hace algunas semanas el cantón Daule y Samborondón en Guayas, y hemos hecho un análisis de todo lo que tiene que ver con llamadas al 171 (línea telefónica para telemedicina) y número de fallecimientos. El Daule es una ciudad bien organizada con un alcalde bien proactivo. Prácticamente lo que sucedía en febrero, antes de la pandemia, se está dando ahora en este momento. En ambos cantones no había sino un fallecimiento en estos días.
¿Esto refleja que la gente ha tomado conciencia de los cuidados que debe tener?
Ellos salen de una manera ordenada, en el centro de Daule, por ejemplo, se ha pintado los círculos donde la gente puede pararse en las veredas con dos metros de distanciamiento, la gente usa mascarilla todo el tiempo y tiene todos los cuidados. Pese a ello, no hay que bajar la guardia y la gente tiene que salir de manera organizada.