Varios líderes europeos y africanos rechazaron el intento de golpe de Estado que se presenta en Sudán por parte del Ejército.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, condenó enérgicamente este lunes el intento de golpe de Estado en Sudán. “Expreso nuestro apoyo al Gobierno de transición de Sudán y pido la liberación inmediata y el respeto de la integridad del primer ministro y los líderes civiles”, dijo.

El ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Heiko Maas, también rechazó el intento de golpe de Estado e instó a las Fuerzas Armadas del país a respetar el proceso de transición pacífica hacia la democracia.

"Los informes de otro intento de golpe en Sudán son preocupantes. Este intento debe ser claramente condenado", dijo Maas en un comunicado y pidió a las fuerzas de seguridad del país regresar a sus cuarteles de inmediato.

Maas afirmó, además: “Hago un llamado a todos los responsables de la seguridad y el orden estatal en Sudán a respetar la voluntad del pueblo y continuar con el proceso pacífico de transición política hacia la democracia”.

“Este intento de golpe debe detenerse de inmediato”, afirmó Maas quien pidió a los líderes políticos de Sudán que resuelvan sus diferencias mediante un diálogo pacífico. “Se lo deben al pueblo de Sudán que luchó por el fin de la dictadura y por el cambio democrático”.

El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, dijo a su turno que sigue con “la mayor preocupación los acontecimientos en curso en Sudán”.

“La UE pide a todas las partes interesadas y socios regionales que vuelvan a encarrilar el proceso de transición”, aseguró Borrell a través de un trino.

Por su parte, el presidente de la Comisión de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat, expresó una “profunda consternación” por “la grave evolución de la situación actual en Sudán”, que culminó, entre otras cosas, con la detención del primer ministro, Abdullah Hamdok, y otros funcionarios civiles.

En un comunicado de la Comisión, Mahamat pidió “la reanudación inmediata de las consultas entre civiles y militares en el marco de la Declaración Política y el Decreto Constitucional”.

Mahamat reafirmó que “el diálogo y el consenso es el único camino relevante para salvar al país y su transición democrática”.

Así mismo, Mahamat pidió “la liberación de todos los líderes políticos detenidos y el estricto respeto de los derechos humanos”.

Horas antes, el Ministerio de Información de Sudán comunicó que el Ejército sudanés había arrestado al primer ministro y otros miembros de su Gobierno.

Según el Ministerio, el arresto se produjo luego de que Hamdok se negase a apoyar lo que describió como un "golpe" de Estado.

La Asociación de Profesionales Sudaneses (SPA) ha convocado protestas públicas contra lo que afirmó se trata de un "golpe militar contra el Gobierno civil". De igual forma los partidos políticos convocaron el lunes a una huelga general y movilizaciones, luego de la toma militar.

Ver también: Ejército de Sudán arrestó al primer ministro y otros miembros del Gobierno

Después de un fallido golpe militar el mes pasado, estallaron profundas tensiones entre la administración militar y civil en el país del norte de África.

Sudán está actualmente administrado por un Consejo Soberano de autoridades militares y civiles, que supervisa el período de transición hasta las elecciones programadas para el 2023, como parte de un precario pacto de reparto de poder entre los militares y el FFC.

*Traducido por Daniel Gallego.