Según un informe publicado por el Ministerio del Interior de España, hay un aumento en la discriminación religiosa y los delitos de odio en ese país.

"Hemos observado un aumento, aunque no a un nivel alarmante, en la islamofobia y los ataques contra los musulmanes, y en el odio religioso en las conversaciones de las redes sociales", dijo Miguel Ángel Aguilar, coordinador de servicios relacionados con los delitos de odio y discriminación en Barcelona, a los medios locales cuando se refería a un informe emitido por el Ministerio del Interior.

El informe dice que hay un aumento del 120 por ciento en los delitos de odio en 2017 con un total de 103 incidentes.

Aguilar también dijo que 39 de los 41 casos relacionados con delitos de odio religioso en 2017, fueron considerados islamofobia.

Según el informe, la mayoría de los delitos de odio religiosos, que son en su mayoría casos islamófobos, se cometieron en la región de Cataluña, que alberga a la mayoría de los 2 millones de musulmanes en el país y tiene 317 mezquitas.

También asegura que la tasa de delitos y ataques islamófobos solo en Cataluña, aumentó 307 por ciento en 2017, en comparación con 2016.

El informe destacó que la mayoría de los comentarios odiosos sobre las religiones se comparten en Internet.

Otro informe sobre la islamofobia en los medios de comunicación, que se preparó con las iniciativas de algunas fundaciones y universidades en España y se publicó la semana pasada, afirma que la islamofobia en los medios de comunicación es una "realidad incuestionable".

Pedro Rojo, presidente de la Fundación Fanar, una organización sin ánimo de lucro para el conocimiento árabe, dijo que "alrededor del 65 por ciento de todos los artículos en los periódicos en 2017 son islamófobos".

Rojo también dijo que podían decir "por primera vez" que la mayoría de los medios españoles eran islamófobos.

Los expertos advirtieron sobre un mayor aumento de los delitos de odio religioso con el surgimiento de grupos políticos de extrema derecha en el país.

*Escrito por Sena Guler.

*Maria Paula Triviño contribuyó con a redacción de esta nota.