Italia informó el jueves que 88 personas más murieron por la pandemia de coronavirus, lo que eleva la cifra de muertos a 33.689. La cifra se debe en parte a que las autoridades dieron a conocer nuevas directrices para evitar que los lugares de veraneo abarrotados, como los balnearios, se conviertan en nuevos epicentros del virus.

La tendencia a la disminución del número de muertes registradas en mayo continuó a principios de junio, confirmando que el pico de la crisis ha quedado atrás. El recuento de infecciones activas cayó de nuevo el jueves a 868, situando el total en 38.429.

Mientras tanto, las recuperaciones siguieron aumentando y llegaron a 161.895, a medida que más pacientes abandonaban los cuidados intensivos, lo que aumentaba la presión al sistema de salud italiano.

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La región norte de Lombardía sigue siendo el epicentro de la pandemia, con 16.201 víctimas, casi la mitad del total.

El miércoles, los italianos pudieron finalmente tomar trenes para reunirse con sus familiares, ya que se les permitió viajar entre las regiones por primera vez después de tres meses de encierro.

Italia también fue uno de los primeros países de Europa en reabrir sus fronteras al turismo internacional, con la esperanza de relanzar su industria turística clave, fuertemente afectada por la pandemia. Los visitantes que vienen de la UE y de los países Schengen no tendrán que pasar por una cuarentena de dos semanas al entrar en el país.

Pero con 7.000 kilómetros de costas y un gran número de zonas costeras, pobladas por 17 millones de personas, Italia se arriesga a transformar sus puntos turísticos en potenciales bombas sanitarias.

Por eso, las nuevas directrices dadas a conocer por el Instituto Superior de Salud de Italia (ISS) el jueves incluyen reservas obligatorias para entrar a los clubes de playa, que se deben hacer en línea y en horas específicas, para evitar las multitudes. La presencia y los datos de la reserva también deben ser mantenidos por los propietarios durante al menos 14 días, para ayudar a rastrear posibles contagios respetando las normas de privacidad.

El ISS aseguró que la distancia de seguridad de al menos un metro, para personas que no son familiares, debe ser garantizada en la playa, pero también en el mar. Cuando eso se hace imposible, se considera necesario el uso de máscaras protectoras. También se debe prohibir todo tipo de reuniones en la playa, como buffets, fiestas y aperitivos, añadió la autoridad sanitaria.

*José Ricardo Báez G. contribuyó con la redacción de esta noticia.