El presidente de Francia, Emmanuel Macron, se unió a las críticas internacionales contra los continuos ataques del régimen de Bashar al-Assad contra los civiles en Idlib, noreste de Siria.

"Condeno firmemente los ataques del régimen de Assad contra la población civil en Idlib", aseveró el mandatario francés a los periodistas al llegar a una cumbre de líderes de la Unión Europea en Bruselas.

"No hay razón para no respetar el derecho internacional humanitario", afirmó, y agregó que los ataques también se dirigen a instituciones civiles y centros de salud.

El Consejo de Seguridad de la ONU, dijo Macron, debe asumir la responsabilidad e intervenir con más fuerza en la situación.

"He visto uno de los peores dramas humanos en Idlib en las últimas semanas", resaltó el mandatario.

En 2018, en la ciudad rusa de Sochi, Rusia y Turquía acordaron convertir a Idlib en una zona de desescalamiento donde todos los actos de agresión están expresamente prohibidos.

Pese a ello, las fuerzas del régimen y sus aliados rusos mantuvieron los ataque contra la región, último bastión de las fuerzas opositoras.

La actual ofensiva emprendida por el régimen y sus aliados en la región ha hecho que casi 900.000 civiles fueran desplazados desde diciembre del año pasado.

La zona de desescalamiento alberga actualmente a unos cuatro millones de civiles, incluidos cientos de miles desplazados, quienes huyeron de diferentes partes del país debido a los ataques del régimen sirio.

Alrededor de un millón de refugiados de Idlib se desplazaron a la frontera con Turquía para huir de los ataques y buscar un refugio seguro.

Turquía ha pedido un cese inmediato de los ataques contra Idlib, y que se siga el alto el fuego, advirtiendo que si los ataques no se detienen, Turquía actuará.

*Traducido por Juan Felipe Vélez Rojas.