JERUSALÉN

No existe un pueblo palestino, afirmó este jueves 22 de febrero la ministra de Asentamientos y Misiones Nacionales de Israel, Orit Strook.

"Nunca habrá un Estado palestino en la tierra de Israel", aseguró Strook en un video que compartió en X de un extracto de su discurso durante una sesión de la Knesét.

"Toda persona culta del mundo sabe que esta tierra es nuestra, para el pueblo israelí y sólo para nosotros", dijo.

La ministra israelí, quien vive en un asentamiento ilegal en la ocupada Cisjordania, afirmó que un Estado palestino sería una "amenaza existencial" para Israel y la "paz y el orden del mundo entero".

"La gran mayoría del pueblo de Israel se opone al establecimiento del Estado palestino", agregó la ministra de extrema derecha y miembro del Partido Sionismo Religioso del ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich.

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Este miércoles, la Knesét votó unánimemente a favor de una decisión del Gobierno de rechazar el reconocimiento unilateral de un Estado palestino.

Israel ocupó Jerusalén Este durante la guerra árabe-israelí de 1967. Anexó toda la ciudad en 1980 y la reclamó toda como su capital "eterna e indivisa" en una medida nunca reconocida por la comunidad internacional.

Los palestinos, por su parte, esperan establecer el Estado independiente acordado por la ONU en 1948 en la Franja de Gaza y Cisjordania con Jerusalén Este como capital.

Por primera vez desde su establecimiento, Israel es acusado de genocidio en la Corte Internacional de Justicia (CIJ), el máximo órgano judicial de las Naciones Unidas, por su guerra en Gaza.

A pesar del fallo provisional de la CIJ, Israel continúa su ataque contra la Franja de Gaza, donde más de 29.410 palestinos han muerto, en su mayoría mujeres y niños, y más de 69.465 han resultado heridos desde el 7 de octubre, según las autoridades de salud palestinas.

La guerra israelí contra el enclave ha provocado que el 85% de la población del territorio se conviertan en desplazados internos en medio de una grave escasez de alimentos, agua potable y medicinas. El 60% de la infraestructura del enclave ha sido dañada o destruida, según la ONU.

*Ahmed Asmar y Aicha Sandoval Alaguna contribuyeron con la redacción de esta nota.