Varias mujeres oficiales del Ejército turco, desplegadas en la frontera de Turquía con Siria en el marco de la Operación Rama de Olivo, apoyan a las unidades avanzadas de la intervención militar que Turquía inició el 20 de enero para liberar la región de Afrin, en el noroeste de Siria, de los diferentes grupos terroristas que la controlan.

“El obús (autopropulsado) Firtina (tormenta) es un gran medio de apoyo de fuego en el campo de batalla gracias a su precisión y movilidad. Tienen un sistema de control totalmente computarizado y pueden desempeñar su labor en cualquier condición climatológica. Esto aumenta la movilidad y la confianza de las unidades que participan en la operación. Es muy importante para mi participar en la operación”, dice la capitán de artillería Dilek Aygun, destinada a una de las baterías de obuses desplegada a lo largo de la frontera con Siria, al señalar que el Firtina puede destruir un objetivo a aproximadamente 40 kilómetros de distancia con gran precisión.

“Me encargo del mantenimiento de los obuses. Para mí es un honor participar en esta operación”, relata la teniente Ceren Ozcelik, comandante de un pelotón de mantenimiento encargado del mantenimiento y reparación de los obuses Firtina.

“Es una labor que enorgullece. Acatamos las órdenes recibidas lo más rápido posible”, relata la teniente Cigdem Yusel, encargada del abastecimiento de munición y materiales. Añade que están preparadas para superar todas las dificultades y que las oficiales llevan a cabo sus deberes cuidadosamente.

Por su parte la teniente Gulru Gizem, comandante de una compañía de mantenimiento, cuenta que ella y sus subordinados se encargan del mantenimiento y reparación de los vehículos que participan en la operación.