El activista cubano Luis Posada Carriles, uno de los mayores enemigos del régimen cubano, falleció en la madrugada de este miércoles en la ciudad de Miramar, en el suroriente de Florida, Estados Unidos.

El también exagente de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA por sus siglas en inglés) murió a los 90 años por un cáncer de garganta.

Según declaraciones de su abogado, Arturo Hernández, al diario Nuevo Herald, Posada Carriles “ya venía enfermo bastante tiempo” y falleció en un hogar gubernamental para ancianos.

Este exiliado cubano intentó en varias ocasiones derrocar el régimen de Fidel Castro. Su figura es reconocida por muchos como un héroe, mientras que el Gobierno cubano lo consideraba un terrorista.

Posada Carriles participó, entre otros hechos, en la fallida invasión de Bahía de Cochinos en 1961.

También fue vinculado con la detonación de varias bombas en hoteles cubanos en la década de los noventa, y con el derribo de un avión de Cubana de Aviación en Barbados, en octubre de 1976, hecho que dejó 73 muertos.