El nuevo presidente de Irán, Ebrahim Raisi, aseguró este miércoles 11 de agosto que la lucha contra la COVID-19 y la contención de la pandemia son los temas más importante del país.

Tras el Consejo de Ministros, celebrado en la capital Teherán, Raisi afirmó que todos los funcionarios estatales deben permanecer activos y que todos los recursos del país deben movilizarse para controlar la COVID-19.

"Combatir el coronavirus y controlar la epidemia son lo más importante. Si no se aprovechan todos los recursos del país, será difícil para nosotros deshacernos de la situación actual", dijo Raisi.

El presidente iraní subrayó la necesidad de combatir la epidemia con métodos más efectivos.

"Nadie tiene derecho a desobedecer las normas sanitarias. El Gobierno, todas las instituciones y las fuerzas armadas deben intervenir con todas sus fuerzas y su prioridad debe ser contener el coronavirus”, agregó Raisi.

El presidente pidió al ministro de Relaciones Exteriores, Javad Zarif, que tome las acciones necesarias para importar más vacunas, mientras que ordenó al ministerio de Salud que acelere la campaña de vacunación.

El clérigo ultraconservador y exjefe judicial de Irán, Ebrahim Raisi, juró como nuevo presidente del país el jueves 5 de agosto, en presencia de dignatarios extranjeros de alto rango.

Raisi logró una victoria aplastante en las elecciones presidenciales de junio, que estuvieron marcadas por la participación electoral más baja en la historia persa. Fue juramentado por el presidente del Tribunal, Mohsen Eje'i, en el Parlamento.

Las infecciones están mostrando una tendencia ascendente con más hospitalizaciones que en las cuatro oleadas anteriores.

Irán registró a comienzos de la semana 39.139 infecciones en las últimas 24 horas, además de 508 muertes, lo que eleva el recuento general a 4,23 millones de casos y 95.111 muertes.

Al menos 13,52 millones de personas han recibido al menos una dosis de la vacuna y casi 3,27 millones han recibido ambas dosis.

*Traducido por Daniel Gallego. ​​​​​​​​​​​​​​