El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ordenó prorrogar por una semana la presencia de las Fuerzas Armadas en el estado de Ceará, noreste de Brasil.

“Autoricé la extensión de la estancia de las tropas federales en el estado de Ceará por otra semana. Esperamos que la situación vuelva a la normalidad lo antes posible. ¡La GLO, en nuestro gobierno, no es eterna!”, dijo el mandatario en un mensaje en su cuenta de Twitter.

El jueves 20 de febrero, Bolsonaro decretó la operación de Garantía de la Ley y el Orden (GLO) por un periodo de ocho días que finaliza este viernes en Ceará, que vive días de violencia por cuenta de motines de policías militares que exigen un aumento de sus salarios y dejan al menos 170 personas muertas.

Según informó la Agencia Brasil de noticias, la extensión de dicho término se definió este viernes en una reunión en el Palacio de Planalto entre el presidente y los ministros de la Casa Civil, Walter Braga Netto; Justicia, Sergio Moro; la Secretaría de Gobierno, Luiz Eduardo Ramos; de la Oficina de Seguridad Institucional, Augusto Heleno; y el fiscal general federal, André Medonça.

Bolsonaro señaló que esperaba que se resolviera el “estancamiento” entre la Policía Militar de Ceará y el gobierno estatal. También defendió la aprobación de un proyecto de ley que facilita el concepto de exclusión de la ilegalidad para los agentes de seguridad durante las operaciones de este tipo.

En Brasil los policías militarizados tienen prohibido hacer huelga según una decisión que fue ratificada por el Tribunal Supremo del país en 2017, motivo por el cual las protestas son clasificadas como motines.

Además de los de Ceará, los policías militares de otros 12 estados están presionando por la mejora en sus condiciones laborales.