LONDRES

El primer ministro británico, Keir Starmer, dejó claro este miércoles que Reino Unido no descarta imponer aranceles recíprocos contra Estados Unidos en respuesta a las actuales disputas comerciales globales, en particular en relación al acero y el aluminio.

Los nuevos aranceles globales del 25% impuestos por el presidente estadounidense Donald Trump al acero y al aluminio entraron en vigor sin excepciones ni exenciones.

Durante el turno de preguntas al primer ministro, Starmer expresó su decepción por los aranceles globales impuestos actualmente a estas industrias críticas y afirmó que el gobierno adoptaría un enfoque pragmático de cara al futuro.

Sus comentarios se produjeron tras una pregunta del líder liberal demócrata, Ed Davey, quien también abordó el tema del presidente estadounidense, Donald Trump, y sugirió que Starmer viajara a Canadá para mostrar su apoyo al recién nombrado primer ministro, Mark Carney, en su disputa comercial con Estados Unidos.

Starmer reiteró que Canadá sigue siendo un aliado vital y afirmó que las negociaciones en curso para un acuerdo económico incluirían aranceles, si se llega a un acuerdo exitoso. Sin embargo, dejó la puerta abierta a nuevas medidas, subrayando que "todas las opciones siguen sobre la mesa", incluidos aranceles de represalia.

UK Steel, el principal grupo industrial del país, expresó su preocupación de que la medida no solo perjudique el comercio directo, sino que también desvíe el comercio de acero de EEUU hacia otros mercados, como el de Reino Unido.

EEUU sigue siendo el segundo mayor mercado de exportación de acero de Reino Unido, después de la UE, con exportaciones de productos de acero especializados que representan el 9% del valor total y el 7% del volumen de las exportaciones de acero de Reino Unido.

*Traducido por Daniel Gallego.