Rusia y Bielorrusia expresaron el viernes su preocupación por lo que llamaron "las políticas occidentales agresivas", después de una reunión entre los ministros de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, y su homólogo bielorruso, Vladimir Makei, en Moscú.

"Teniendo en cuenta la línea abiertamente agresiva de nuestros colegas occidentales, acordamos coordinar los esfuerzos para fortalecer la soberanía estatal de la Federación de Rusia y la República de Bielorrusia, y para garantizar la seguridad nacional de nuestros dos países sobre la base de las leyes internacionales vigentes", dijo Lavrov.

El ministro ruso dijo que expresó preocupación por la postura de la UE contra ambos países, que no es constructiva, y agregó que las acciones de la OTAN también fueron discutidas y evaluadas como un intento de "escalar la situación en el continente europeo".

"Vemos el ejercicio militar en curso de Defender Europe 2021 como una demostración de las intenciones agresivas de la alianza", aseguró Lavrov.

La UE ha impuesto sanciones a los principales funcionarios bielorrusos desde la sexta reelección del presidente Alexander Lukashenko en agosto de 2020, que la oposición declaró como fraude.

La UE también ha decidido imponer más sanciones y prohibir que las aerolíneas bielorrusas utilicen el espacio aéreo y los aeropuertos del bloque de 27 naciones tras la "desviación forzada" de un avión de pasajeros y el arresto de un periodista opositor.

Moscú y Minsk tienen estrechos vínculos políticos, económicos y militares, y Lukashenko ha confiado en el apoyo de Rusia en medio de las sanciones internacionales.

Mientras tanto, la reciente cumbre de líderes de la OTAN en Bruselas reafirmó el enfoque de doble vía de defensa y diálogo de la alianza hacia Rusia. La alianza también se comprometió a seguir apoyando a Ucrania, que mantiene relaciones hostiles con Rusia desde 2014.

Makei dijo que los desarrollos recientes "demuestran claramente la existencia de centros de estrategia unidos, así como herramientas especiales para librar una guerra de información contra ambos países".

El ministro bielorruso aseguró que Minsk cambió su política sobre la concesión de acreditaciones a corresponsales extranjeros para evitar una cobertura sesgada.

"Varias organizaciones de medios contrataron a opositores al Gobierno como sus periodistas, quienes no proporcionaron una cobertura objetiva de los hechos y estaban involucrados en actividades de propaganda", afirmó Makei.

"Muchos políticos en Occidente se consideran personas que pueden decir lo que está bien y lo que está mal... no pueden acostumbrarse a la idea de que el mundo se está desarrollando no solo de acuerdo con su voluntad y su deseo", dijo. "Creo que el totalitarismo prodemocrático es más peligroso que el totalitarismo comunista".

Makei aseguró que Bielorrusia resistirá las sanciones, a pesar de las dificultades que causarán, y responderán con contramedidas.

"Resistiremos, teniendo en cuenta el hecho de que Bielorrusia no está sola, hay una serie de aliados y socios que siempre están dispuestos a apoyarnos, (y) definitivamente lo resistiremos. Entendemos que esto creará ciertas dificultades para el liderazgo bielorruso. Pero el Gobierno y el presidente harán todo lo posible para asegurar que la gente salga de este período difícil con pérdidas mínimas", dijo.

Relaciones Rusia-Estados Unidos

Por su parte, Lavrov dijo que la normalización de las relaciones diplomáticas entre Rusia y Estados Unidos es posible si ambas partes toman medidas simultáneamente.

El presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo estadounidense, Joe Biden, celebraron el miércoles su primera reunión cara a cara desde que este último asumió el cargo en enero. Ambos mandatarios acordaron que sus embajadores regresen e inicien consultas sobre control de armas, estabilidad global y ciberseguridad.

Ver también: Los resultados que deja la cumbre entre Biden y Putin en Ginebra.

*Maria Paula Triviño contribuyó con la redacción de esta nota.